Esta Sierra es tan variada que tiene una época muy seca que son los meses de julio y agosto, pero también un invierno en que, si ha llovido suficiente, el campo está completamente verde, con el pasto crecido y hay muchas reservas de agua. El embalse del Retortillo y la presa del Bembézar son ejemplo de estas reservas. Además, muy cerca de la casa rural, hay un pequeño pantano que sirve de reserva para esa zona, y un plan muy bueno es ir ahí a hacer un picnic o simplemente a observar como saltan las carpas. También hay un río cercano, que cuando lleva agua es muy bonito, y caminar por los alrededores del río es también un plan muy campero rodeados de un paisaje estupendo.

Gracias a las lluvias de este invierno, los arroyos han corrido y el campo es un espectáculo. Se prevé una primavera maravillosa, sin duda unas de las mejores épocas para disfrutar del campo, de la casa y de esta sierra tan especial!